viernes, 8 de octubre de 2010

La baraja del Corral de Comedias




Esta singular baraja española, datada en 1729, se encontró en el zaguán de entrada del Corral de Comedias durante las obras de restauración que se hicieron a principios de los años cincuenta del siglo pasado. Por fortuna, había permanecido oculta entre la paja y se halló completa y en un estado de conservación bastante aceptable. En la actualidad se encuentra en el Museo Nacional del Teatro, donde la depositó el Ayuntamiento para su mejor conservación.


En 1990 se hizo una primera edición, pero desde entonces no se había vuelto a reproducir y llevaba muchos años agotada. En virtud de un acuerdo con los representantes municipales, he realizado una nueva edición que está a la venta en mi tienda y en el Corral de Comedias a un precio de 9 €, para que turistas, coleccionistas y amantes del Corral puedan tener esta baraja tan especial.


Si alguien está interesado en tenerla y no puede viajar a Almagro, se puede poner en contacto conmigo a través de mi correo: pacoromero@ebaobab.com






miércoles, 6 de octubre de 2010

Nueve meses más tarde

Durante todo este tiempo he tenido aparcado mi blog, quizás porque llegué a pensar que se trataba de una obligación y que estaba saturado, o quizás fuera porque no creía que tuviera algo importante que contar, o que nadie se fuera a molestar en leerlo. Es curioso que mientras el blog perdía importancia en mi vida cotidiana, la haya adquirido en mi obra literaria, pues en dos de mis últimas novelas está muy presente.

En estos meses he continuado escribiendo en mi tienda y vendiendo mis libros, que cada día cuentan con nuevos lectores y muchos de los anteriores se han hecho adictos, por lo que cada vez tengo más peticiones por internet porque la mayoría viven muy lejos de Almagro. He completado una novela, tengo otra bastante avanzada y no he ganado nuevos premios literarios, aunque he quedado finalista del Premio Ateneo de Valladolid de Novela con Las manos prestadas. Curiosamente la ganadora ya había publicado con la editorial que lo convocaba, una casualidad cuando menos sospechosa. También he experimentado como editor de obras ajenas, y he llegado a la conclusión de que hay editores que tiene un morro que se lo pisan al aprovecharse de los incautos escritores noveles que quieren ver publicada su obra y que están dispuestos a pagar tres veces su coste confiando en que ese paso les sirva para abrirles las puertas del mercado literario.

Como los productos relacionados con Almagro siguen siendo una de mis fuentes de financiación, he escrito una completa guía de Almagro en la que incluyo las mejores fotos que he hecho durante los trece años que llevo en la ciudad. También he editado la reproducción de la baraja española que se encontró durante la restauración del Corral de Comedias y que está datada en 1729.

Puede que en esencia nada haya cambiado durante este tiempo, aunque en época de crisis es un privilegio vivir de aquello que se ama, y que la principal preocupación que tengo cada día sea la de seguir aprendiendo para escribir mejor.