domingo, 24 de abril de 2011

Un camino más largo y gratificante

Ha llegado un nuevo día del libro y las editoriales vuelven a lamentarse de lo mal que está el sector y de las muchas dudas que crea el libro digital; los libreros se quejan del futuro de las librerías; y los escritores, de que se sienten desamparados ante un mercado que busca más el éxito rápido que la defensa de sus intereses.


Se puede decir que yo represento a los tres sectores, aunque en ninguno de ellos sea reconocido. Soy escritor, editor y tengo mi propia tienda de libros, tanto física como en Internet, con la peculiaridad de que todo va en una única dirección: mi obra, desde la creación hasta la entrega al lector. Fue una apuesta que inicié hace catorce años con mi sello editorial Baobab Ediciones y que culminé hace seis con la tienda que abrí frente al Corral de Comedias de Almagro y mi web www.ebaobab.com


Yo también podría quejarme como editores, libreros y escritores, pero llegué a la conclusión de que esa vía solo conduce a la depresión. Evidentemente no habría seguido adelante si no hubiera sido por aquellos lectores que a cuentagotas han ido acercándose hasta mi obra, simplemente por la curiosidad de leer algo diferente o por apoyar a alguien que ha tomado una vía tan osada como abocada al fracaso. La fidelidad de esos primeros lectores junto a aquellos que se han acercado a través de los comentarios de los que me han descubierto, me han permitido contemplar el futuro sin miedo y sin envidia de los que venden mucho. Al fin y al cabo tengo el privilegio de escribir sobre lo que me apetece y publicarlo cuando deseo con el título y el formato que más me gusta, y sin tener a mi lado a editores o agentes que cuestionen mi trabajo porque no es todo lo comercial que a ellos les gustaría.


La experiencia me ha enseñado que el éxito en la vida no es ganar mucho dinero ni que la gente te asalte por la calle para pedirte un autógrafo. El auténtico éxito consiste en dedicar tu vida a aquello que amas y con lo que disfrutas y vivir de ello.


Durante los últimos años lo he conseguido y en mi mente siguen apareciendo nuevas historias con las que seguir jugando.