miércoles, 12 de agosto de 2009

Contubernios Líricos

Supongo que los que leen mi blog se preguntarán qué es eso de Contubernios Líricos. Hasta hace pocos días yo también me lo preguntaba. Todo comenzó en mi tienda, como la mayoría de los hermosos encuentros que he tenido últimamente. Hace poco más de un mes un turista me compró algunos de mis libros, y antes de marcharse me preguntó si quería asistir a un encuentro que todos los años hacen en Luarca un conjunto de amigos que tienen inquietudes artísticas y sociales. Yo le dije que sí, y no tanto porque comprendiera de lo que se trataba, como por escaparme unos días de Almagro a principios de agosto.
Durante el viaje de ida a Luarca (casi 800 kms.) tenía muchas dudas porque soy una persona que no me integro con facilidad en grupos donde no conozco a ninguno de los miembros, pero nada más llegar me sentí muy bien acogido y a través de lo que me comentaban comencé a tomar conciencia de lo que eran los contubernios.
A partir de ese momento he vivido cinco días de encuentros de los que dejan poso. Poetas, titiriteros, actores, mimos, magos, cantautores, videoartistas, directores de cine, grafiteros, dramaturgos, ensayistas, profesionales de la radio, profesores y otras personas, no menos interesantes, que no desarrollan actividades artísticas nos hemos reunido en los Contubernios Líricos con el único fin de compartir experiencias y hacer pasar un buen rato a todos los que se acercaran para conocer lo que se estaba haciendo.
La grandeza de este encuentro es que no hay ninguna entidad pública ni privada que lo respalde. Surgió por la capacidad de aglutinar gente que tiene Pedro Gilthoniel, algo que refrenda cada día con su generosidad. Aquel que ha participado un año en los contubernios desea volver para encontrarse con personas que no ve durante el resto del año y que ya son amigos.
En el viaje de vuelta venía escuchando un disco de Marro, otro de los contubérnicos y excelente cantautor, y al escuchar el tema ‘Llueve’ me emocionaba al recordar lo vivido. Ya falta menos para que comiencen los contubernios de 2010, y salvo causa de fuerza mayor, volveré a Luarca para sumarme a ese grupo de personas que trabajan en equipo para apoyar proyectos individuales, y donde los egos se aparcan por unos días porque hay mucho que aprender y disfrutar.

2 comentarios:

Pedro A. Pérez dijo...

Hola Francisco. Me alegro de volver a saber de tí. Vamos a hacer un ejercicio de memoria: soy el chico de Madrid que conociste en Contubernios y que escribía teatro, ¿recuerdas?. Bueno, pues resulta que, dentro de esta vida ajetreada de la urbe, siempre hay un momento del día que te reconcilia de nuevo con la vida. Hoy el momento ha sido recordar, gracias a tu comentario, los ya añorados Contubernios. He vuelto a revivir la compañia de todos vosotros, la lluvia compañera y enemiga, la sidra, la conversación siempre interesante y la sensación de compartir sin deudas ni premios. Todo un placer, sin duda. Espero volver a verte pronto pero te seguiré a través de tu blog recien descubierto. Saludos.

Francisco Romero dijo...

Gracias Pedro por ponerte en contacto conmigo y recordar los buenos ratos y descubrimientos que hicimos en los Contubernios, algo que no es fácil de explicar a los
que no estuvieron allí. Espero que
sigamos en contacto. Un saludo.